Como nos cambió la
llegada de la World Wide Web, directa o indirectamente a todos. Como nos
podemos plantear que, a través de las redes sociales, indiscriminadamente se
utiliza el maltrato psicológico y la falta de educación sale a relucir.
Tratando de ser lo más conciso posible expresare mi punto de vista sobre esta
revolución tecnológica enfocándome puntualmente en la Internet.
La Red, World Wide Web, o comúnmente llamada Internet desde su
nacimiento y posterior masificación produjo un impacto profundo en el mundo
laboral, el entretenimiento y la expansión del
conocimiento nivel mundial. Gracias a la web, millones de personas tienen
acceso fácil e inmediato a una cantidad extensa y diversa de información
en línea.
Las bibliotecas y enciclopedias quedaron un tanto obsoletas, la web ha
permitido una descentralización repentina y extrema de la información y de los
datos. Algunas organizaciones comerciales animan a su personal para incorporar
sus áreas de especialización en sus sitios, con la esperanza de que impresionen
a los visitantes con conocimiento experto e información libre.
Internet ha llegado a gran parte de los hogares y de las empresas de los
países ricos, la clase baja no dispone de los medios para poder operar dentro
de un mundo cada vez más tecnológico. En este aspecto se ha abierto una brecha con
los países pobres, en los cuales la penetración de Internet y las nuevas
tecnologías es muy limitada para las personas.
No obstante, en el transcurso del tiempo se ha venido extendiendo el
acceso a Internet en casi todas las regiones del mundo, de modo que es
relativamente sencillo encontrar por lo menos 2 computadoras conectadas en
regiones remotas.
Desde una perspectiva cultural del conocimiento, Internet ha sido una
ventaja y una responsabilidad. Para la gente que está interesada en otras
culturas, la red de redes proporciona una cantidad significativa de información
y de una interactividad que sería inaccesible de otra manera.
Internet entró como una herramienta de globalización, poniendo fin al aislamiento
de culturas. Debido a su rápida masificación e incorporación en la vida del ser
humano, el espacio virtual es actualizado constantemente de información que
está al alcance de solo un click.
Podemos encontrar en contrapunto la
opinión de Clifford Stoll, un astrónomo radicado en los Estados Unidos que
realiza desde hace más de 10 años una cruzada contra la “locura de la
internet”, podemos decir que Stoll fue uno de los pioneros de la Internet en la
década de los 80, no desmerece los avances que la red nos acercó de manera
rápida y practica material que anteriormente nos demandaba mucho
trabajo y tiempo encontrar, pero hace énfasis en los problemas que puede
aparejar a nivel educativo para los niños y jóvenes si no se emplea un método
en el cual la computadora no sea el centro de toda enseñanza.
Stoll nos cuenta sus experiencias en
los Estados Unidos, pinta la imagen e un paisaje pedagógico en el que Internet
envuelve actualmente la mayor parte de las escuelas y dicta los contenidos y
los métodos de enseñanza, los pedagogos de los medios de comunicación, los
padres que temen por las oportunidades de sus hijos, y las empresas que
financian a la industria de las computadoras bajo una capa de altruismo, forman
todos juntos una alianza que se propone hacer a los alumnos escolares “aptos
para el futuro”.
Con frecuencia cada vez mayor se
invierte dinero, que antes era empleado para los maestros o la adquisición de
libros, en computadoras y en conexiones con Internet, en software y en trabajos
de mantenimiento y reparación de los aparatos, así como en salarios para los
expertos en los sistemas, al tiempo que bibliotecas, salas de música o
laboratorios
de Química son transformados en salas
de computación. En lugar del experimento con la probeta de ensayos y el mechero
de Bunsen, surge ahora la simulación en la pantalla de la computadora.
Tras la fachada de la escuela virtual
se oculta mucho más. Los intereses económicos y ciertas visiones educativas de
los políticos se dan la mano con la utopía didáctica del aprendizaje sin
esfuerzo, las animaciones y los simuladores visuales según Stoll tienen por
objetivo disolver los esfuerzos intelectuales que encierran en si las
operaciones matemáticas, la ejercitación de las lenguas extranjeras, como así
también la comprensión de los problemas de la naturaleza.
No es posible un auténtico aprendizaje
sin esfuerzo, y que su premio no sea solo el placer del
aprendizaje, sino que radique en una la comprensión más profunda y
verdadera.
En nuestro país en la actualidad el
servicio de Internet no es gratuito y lejos está de ser accesible a toda la
comunidad, sin embargo las redes sociales crecen a pasos agigantados a través
de los dispositivos móviles, los teléfonos inteligentes revolucionan cada vez
más el mundo y dejan a muestro fácil alcance un universo de posibilidades, que
si supiéramos aprovechar sacaríamos un real beneficio de la información
obtenida.
El gran problema es que en mi opinión,
la masificación de las redes nos trajo un facilismo muy difícil de desarraigar,
todo se ha vuelto impersonal, y le dio un manto de impunidad a aquellos que
quieren expresar solo de mala manera todo lo que antes no podían. La falta de
respeto es tema diario, la gente habla sin bases y los opinologos están al pie
del cañón, los derechos son pisoteados y los buenos modales olvidados. No me
importa como escribo, total el Word me lo auto-corrige no me importa
a quien ofendo, total no sabe quién soy, no me importa no saber de dónde vengo,
cualquier cosa lo busco en Wikipedia.
Es un camino peligroso el que podemos
estar transitando sino sabemos encontrar a aquellos que nos dirijan
correctamente hacia un buen uso de los avances tecnológicos sin tener que
depender de una máquina para poder hacer buen uso de nuestro idioma o saber
cuáles fueron y son nuestras raíces, como está formado el mundo, ese mundo que
no solo está a través de nuestro monitor, ese mundo que espera por nosotros,
solo está en uno mismo el querer transitarlo, pero para ello tenemos que saber
que solo llegaremos a nuestro destino si sabemos quiénes somos, lo
que valemos y que es lo que podemos brindarle a la sociedad.
Material consultado:
* Internet como trampa pedagógica, educación y
ciencia (2001) autor Krischke, Wolfgang Pág.
48-50
* Le Magazine de educación y cultura n° 18
(2002) OI Biblioteca del Congreso de la Nación